lunes, 21 de noviembre de 2011

JE NE VEUX PAS TRAVAILLER

¿Profesora o proyeccionista?

Desde que empecé mi periplo como sustituta este curso, he tenido ocasión de conocer tres institutos de Secundaria. Uno en el área de Sant Cugat del Vallés, otro en Sabadell y otro en Ripollet. En el primero, al que ya señalé como ejemplar, me dediqué a ejercer de profesora de Francés sin ningún impedimento. En el segundo, la profesora había pedido un permiso sin sueldo (los alumnos apuntaban que para "irse de vacaciones") y había dejado organizado un programa cinematográfico para todos los grupos.
Las películas presentadas fueron:
     2º ESO: Les enfants du choeur, vista por enésima vez en un instituto. A los críos les gusta y no caen en la cuenta del sentimentalismo que impregna toda la historia y en que el muchacho protagonista es un actor pésimo, pero de esos que gustan tanto en Francia, como una especie de ángel maldito, que aquí sólo dirige miradas inexpresivas.
    3º ESO A: Vénus, salon de béauté, una película totalmente inadecuada para los adolescentes por su contenido y entramado psicológico.
     3º ESO B: Délicatessen. Una cinta con estética farsesca que tuvo mucho éxito en la época de su estreno pero que los adolescentes no entienden aunque ríen mucho con los elementos más truculentos.
    4º ESO: La classe. Una película de corte verista que conecta muy bien con la audiencia porque se identifica con los protagonistas, adolescentes de un liceo francés en un barrio deprimido que se enfrentan a sus circunstancias con ayuda de sus profesores, a los que a veces manipulan o tergiversan para no asumir sus responsabilidades.
     En el siguiente instituto me encuentro con que se imparte Educación para la Ciudadanía y que la mejor forma de evitar polémicas es tratar "temas universales" con películas. Aquí sí que se introduce una ficha de trabajo para que los alumnos reflexionen, mínimamente, sobre lo que han visto. Como los grupos son tres, tres veces tengo que ver Slumdog Millionnaire, la exitosa cinta británica con un argumento cargado de golpes de efecto y de incoherencias narrativas que narra la historia de un muchacho de las barriadas miserables de Bombay que gana un concurso de preguntas y respuestas gracias a que, ya es casualidad, todas las preguntas tienen que ver con su heroica vida.
     3º ESO: Tanguy, una graciosa comedia con actores de renombre que presenta la historia de un joven talentoso que no tiene la menor intención de abandonar el hogar familiar y que pone a los padres al borden del crimen con su abuso territorial. Se prevé que haya una ficha para comentar algunos aspectos.
     Los alumnos de Bachillerato ya están reclamando la película que ven "después de cada unidad didáctica".
     Según la LOE, la inclusión de medios audiovisuales es un complemento necesario y útil en el aprendizaje de lenguas extranjeras, pero actualmente se produce un abuso en el recurso a ellas, que suelen presentarse enteras, rompiendo la dinámica del curso porque cada largometraje exige unas tres horas de clases, desde que se entra, se lucha contra los elementos electrónicos y se impone silencio a los alumnos.
     Si se suma que las películas también sirven para ilustrar lecciones de Historia, Filosofía, Tutoría, es obvio que se dedica al elemento audiovisual más tiempo del que yo considero útil. En lugar de recurrir a fragmentos, muchos profesores proyectan películas enteras, la mayoría de tipo comercial con un lenguaje visual y narrativo estandarizado y plano que no supone una ampliación de conocimientos de otro lenguaje o de la cultura francesa. Mucho menos en lo que concierne a Tutoría o Educación para la Ciudadanía, donde los argumentos son inevitablemente estadounidenses, ya que es el único país que tiene recursos para tratar temas de interés universal: El día de mañana para el cambio climático; La Isla, para los peligros del desarrollo científico; la citada Slumdog sobre la pobreza en el Tercer Mundo; Quiero ser como Beckam para tratar la discriminación de la mujer; Cadena de favores para reflexionar sobre la solidaridad y el individualismo...
     Creo que se debería tratar este tema con más profundidad, ya que en lo referente a la clase de Francés todavía no he advertido que esas proyecciones sirvieran para aumentar sus conocimientos de la lengua, ya que, lógicamente, se ofrecen subtituladas y los alumnos las consideran como un pasatiempo, una forma de no hacer clases en lugar de verlas como un complemento necesario de las prácticas de comprensión auditiva. En su lugar deberían usarse fragmentos de todo tipo de formatos, que tengan que ver con el francés hablado y la realidad inmediata, buscar el contraste con la realidad propia mediante comparaciones bien establecidas, o el uso de canciones y ejercicios online tan bien planteados como los que ha creado la mítica Carmen Vera, catedrática de Francés en una escuela de idiomas de Albacete que ha hecho la tarea de los profesores mucho más fácil con sus Hot Potatoes y su listado de canciones con letra, como la que puede escucharse con este enlace: href= "http://platea.pntic.mec.es/cvera/hotpot/martini.htm">